domingo, 5 de abril de 2009

Los zapatos Masai

Esto bien podría ser una entrada de publicidad o promoción. Nada más alejado de la poesía. No lo es. Tampoco es el título de un hermoso relato, algo más cercano a la literatura, aunque puede que no tarde es ser eso, algo sencillamente bueno para nuestros maltratados cuerpos. Tampoco es una entrada que hable de moda, ni que esté a la última, bueno quízá quede poco para este momento llegue, pero lo cierto es que yo nunca he sido de "ir a la última" ni mucho menos, no tiene que ver con eso. Pero hace ya varios meses que S. y yo andábamos detrás de unos MBT, pero no, tampoco tiene mucho que ver con la coquetería, más bien con la salud. Los vimos por vez primera hace casi un año en el AVE. Los llevaban una madre y una hija, y parecía que volaban, que se deslizaban sin esfuerzo alguno, que no pisaban la tierra con el impacto con el que el resto la pisaba. Recuerdo que S. y yo nos miramos comprendiendo sin hablar el interés mutuo que nos había despertado ese calzado. Bien, ayer fue el día. Nos fuimos a Principe de Vergara a ese escaparate donde pegamos nuestra nariz hace ya meses observando en un video cómo una tribu Masai caminaba erguida y descalza. Los zapatos MBT.

MBT es conocido como el "anti-zapato" debido a que ni guía ni amortigua ni sirve de apoyo al pie. En realidad, MBT hace todo lo contrario y produce la sensación de caminar sobre superficies naturales y blandas. El tradicional tacón se sustituye por un "sensor de talón" y una suela oscilante, obligando a quien los lleva a mejorar su equilibrio al caminar y a mantener la columna recta. Mediante la acción coordinada de los músculos, éstos se convierten en amortiguadores del impacto, el peso sobre la columna y articulaciones disminuye y se libera la tensión muscular. Los MBT son un instrumento de salud y puesta a punto que se puede utilizar en todas las actividades que realizamos a diario.

El efecto de su suela multilaminar y curva patentada es el de simular una superficie natural e irregular para así hacer que el cuerpo trabaje como la naturaleza lo concibió, usando todos nuestros músculos para asegurar nuestra estabilidad y reforzar la protección de nuestra estructura ósea. A través de la función biomecánica de MBT, los músculos, columna y articulaciones empiezan a trabajar de una forma anátomicamente correcta. Por ello, tanto los dolores como el desgaste de las articulaciones se ven reducidos.
En una superficie dura ocurre lo contrario. Con cada paso el pie impacta contra el suelo casi sin que podamos controlarlo y el cuerpo recibe el efecto del impacto. Con el tiempo la postura se inclina, se producen bloqueos, exceso de tensión y debilidad en los músculos. El cuerpo humano no está concebido para caminar constantemente sobre superficies lisas y duras. Este producto no solo fortalece la columna vertebral y las articulaciones, sino que mejora la manera en que utilizamos los músculos
MBT (MBT & Masai Barefoot Technology®)
Podría haber titulado esta entrada como El efecto Mariposa.







Ayer fuimos a la tienda pero como aquel que sale a dar un paseo. Lo malo es que no pudimos salir de allí sin quitarnos los zapatos. Nos llevamos dos pares. Cuando llegamos a casa nos los volvimos a probar y dios, qué lejos quedaba el suelo, pero nos encontrábamos como flotando en otro firme, un firme que moldeaba nuestros pies y os juro que yo jamás me había sentido tan bien caminando con los pies vestidos. Me encanta ir siempre descalza y esto, esto es lo más parecido a eso. Es una sesión de entrenamiento y masaje constante. Además tampoco había sentido lo que era caminar más erguida sin esfuerzo alguno, con la misma naturalidad que un Masai. Mi cabeza y mi cuerpo toman esa forma curvilínea que vemos en el video. La postura más sencilla pero la que más maltrata. En cuanto llegue la pequeña masai S. nos vamos de paseo. Hoy aprenderemos a caminar como camina mi pez, hacia adelante.

2 comentarios:

Isabel Mercadé dijo...

Los había visto en un escaparate en Barcelona, me habían llamado mucho la atención, pero después los había olvidado. Gracias por recordármelos, Nuria. Los buscaré.
Felices paseos.

Isabel Mercadé dijo...

Felices pasos, quería decir, pero...bueno, las dos cosas.