AQUELLA vaca tenía la fuerza
de un gran barco encallado
en el océano enfermo
de una vitrina.
Y ahora, ahora se extingue sola
Suspendida dentro de ese cristal en equilibrio.
Pobre vaca sorda
© Nuria Ruiz de Viñaspre
* Propuesta instalación de Damien Hirst
3 comentarios:
Me alegra que Hirst te haya calado tan hondo. No puedo dejar de sentirme "culpable".
Un beso, vaquita loca.
El difícil equilibrio del silencio.
Uff qué vaca tan estremecedora, me encanta esta propuesta que nos haces Nuria.
Ánimo.
Un abrazo,
Estel J.
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