domingo, 24 de julio de 2011

en el corazón de noruega

Anders Breivik tiene una piedra en el enorme hueco donde debería latir su corazón. Pero una piedra en su hábitat natural tiene más latido que el que le puede dar a su pecho. Solo espero que llegue el día en el que esa piedra se humedezca por la lluvia, que se desgaste erosionada, vuelva a latir a su orilla y ese hueco desnortado en él vaya tomando carnalidad y sangre y vena y color.

adiós a las armas
adiós a los hombres grises


2 comentarios:

Meme Vergara dijo...

Difícil determinar que llevó a éste hombre a cometer semejante acto salvaje, lo que no puedo ni imaginar es el temor y el horror de esas 85 personas que estaban disfrutando y terminaron encontrando la muerte, de una manera tan arbitraria.

Me pregunto que lleva a un hombre a portar un arma (o dos) según algunos testigos y caminar por hora y media en una isla matando gente.

Me pregunto que piensa ese hombre en la soledad de su casa, cuando toma la decisión de llevar a cabo, macabro plan.

Me pregunto por su entorno, su familia?

Y lo que me pregunte sé que no tendrá respuestas.

Golfo dijo...

"...y si la piedras no pueden hacer más que el corazón humano, al menos pueden hacer tanto como él"...
Albert Camus.

Por alguna extraña y oscura razón, siempre me gustó esta frase, aunque nunca la pillé...

...hasta hoy.