jueves, 6 de junio de 2013

niall binns

me encanta este poema y si además es escuchado por la voz del propio binns, como fue el caso y el hallazgo, más placer aún si cabe... más tristeza, más amor, más desamor, más asimilación, más desasimilación, más esperanza, más desesperanza, más fe, más desfe, más desnavidad, más todo, más nada


Christmas Story
Yo compro el pavo, el oporto y el pudding
Tú el mazapán, el marisco, el turrón
Compro crackers, mince pies, mantequilla de brandy
salsa de pan, y de arándano agrio
Tú compras polvorones, nueces y chocolate
y una ristra de luces navideñas
Paso toda una tarde en Marks & Spencers
Tú vas y vienes por El Corte Inglés
Compro un compact de Carlos Núñez para mis padres
Tú una botella de champán para los tuyos
Compro media docena de botellas de Rioja
La tarjeta visa arde entre tus manos
Compro media docena de paquetes
de media docena de latas de guinness
Tú acumulas boletos de lotería:
                                                     en vano

       Y entrando en el salón nos detenemos
       y nos besamos largamente bajo el muérdago

Desempaquetamos comida, empaquetamos regalos
Tú pelas las patatas, y limpias el marisco
la lechuga, las coles de Bruselas
Yo sepulto un penique en el pudding
– Si te toca el penique
tendrás suerte en el año (no te rías de mí)
Tú pones el mantel especial, con las velas
rojas, los crackers y las nueces
Por el culo del pavo yo introduzco el relleno
de albaricoque, almendra y tomillo
– La comida inglesa es una mierda, te ríes
– La cocina española no existe, te contesto
casi. Pero no: me controlo: es Navidad
Tú pones un cassette de villancicos

       Y al volver al salón nos detenemos
       y nos besamos anchamente bajo el muérdago

Dedicas una tarde a poner el Belén
Yo a decorar el árbol: pongo una estrella arriba
Un ángel ha perdido la cabeza, te quejas
Con ternura lo entierras en el heno
Los pastores despiertan: uno apunta
a la estrella de plástico en mi árbol
Cuando vas al servicio, desalojo al bebé
y recuesto en el pesebre a un burro
Extravío a los reyes por el cuarto
En un sillón, Melchor; Baltasar, con el cactus
Gaspar en un estante, con gesto de suicida
De vuelta en el salón, rompes a llorar
Muerto de la risa, me tildas de insensible
Te he faltado el respeto, a tu fe, tu cultura
Estoy hasta el culo de católicos; tú
estás harta, me dices, de mi vacío
– And so, canta John Lennon, this is Christmas
y en efecto – What have we done?, mi amor
te pregunto.
    Tú te encoges de hombros

       Y al salir del salón apenas nos detenemos
       nos rozamos los labios bajo el muérdago

Yo sirvo el pavo, el oporto y el pudding
el marisco, las coles de Bruselas, la salsa
de pan, el mazapán, el turrón, las patatas
los polvorones, nueces, mantequilla de brandy
el rioja, mince pies y la salsa de agrio arándano
Te tocó a ti el penique en el pudding
Me tocó a mí el fregar los platos, la cocina
Tomamos café en el sofá, tú quieres
que salgamos con tus amigos. Es
Noche Buena: celebremos. Pero yo
sólo pienso, de repente, en mi casa, navidades
de ayer: I was dreaming
of a White Christmas, unas pascuas blancas…
Desapareces de pronto, te disfrazas
de Papá Noel, y bajas, roja, riéndote
me rellenas de tontas baratijas
la media que colgué
al pie de la falsa chimenea, como en broma
Te sientas en mis rodillas, bella, barbuda
– Felices Pascuas, me susurras

       Y al salir del salón nos detenemos
       y nos mordemos lentamente bajo el muérdago

Tú estás harta del pavo, del oporto y el pudding
Simplemente pensar en el turrón da náuseas
Relleno bolsa tras bolsa de basura con restos
de marisco, pedazos de patatas, coles
paquetes vacíos, latas estrujadas
salsa de pan ya tiesa, papel de chocolate
huesos de pavo, cáscaras de nueces
Me dan risa tus gases; te asquean los míos
En voz baja cantas Noche de Paz
A voz en cuello aúllo We Three Kings, y de pronto
“Navidad Navidad” y todo el retintín
de Dulce Navidad, corean tus sobrinos
encantadores, ¡qué sorpresa!, por su teléfono móvil
– Merry Christmas!, les grito, and a Happy New Year!
Para ti, sin embargo, es como hablarte en chino
Tú te arrancas la barba blanca de Santa Claus
Brilla tanto tu cara como el traje
Hay trozos de algodón pegados a tu piel
Tienes las manos negras. – Con carbón, dices: Coal!
Echado en el sofá, como si no existieras
paso de ti y todo, olímpicamente
Me atiborro de latas de cerveza
me atiborro
de latas de cerveza

       Y cuando dan las doce, al irnos a dormir
       no nos detenemos
       nos evitamos para siempre bajo el muérdago


1 comentario:

Anónimo dijo...

No hay mucho de nuevo en esta lectura, emociones torcidas de un ir y venir incesante, un alma tormentosa de este Sr. Beans ... creo que intenta ser revelador pero no leo en su poema nada que no haya sido revelado ya...me pregunto cual será la causa de su escuálida fama... leeré el resto de sus escritos...