Un primero siempre lleva a un segundo, o lo que es lo mismo, al uno siempre le sigue un dos, o en esa matemática confío.
Hoy escribí mi primer poema de un último trabajo fabricado en mi memoria quieta. Un dolor en el ojo izquierdo persigue incansable a mi ojo derecho desde ayer noche. Sólo espero que no le de alcance, se quedarían ciegos. Todo ello tambalea mis ideas, nada quietas por ahora, las circunda, pero hoy he escrito mi primer poema desde hace meses y siguiendo la ecuación de más arriba, espero que éste me lleve a un segundo. En cuanto llegue S. le daré a leer todo lo que haya escrito hasta ese momento futuro, ya que a un momento pasado siempre le sigue su acompañante futuro. Hoy me siento un poco más libre que ayer.
9 comentarios:
pues que sea como siempre un crecimiento más
un beso
Ya te lo he dicho, pero lo repito: enhorabuena por esta primera pieza de tu nuevo puzzle del alma.
Menos mal que ya acaba agosto, Nurita.
De regreso, al fin de los fines.
*
¡Qué agradable volver a un lugar tan amable! Reconforta leerte.
Saludos
de la fuente primigenia nace el río...
y todos los numerales en fila esperándote..., Nuria,
un abrazo.
Tacita a tacita... se vuelve uno adicto a la cafeina.
Al final ese primero me llevó a un segundo, y ese segundo a un tercero y el tercero a un cuarto y así sucesivamente. Todo es tan sucesivo...
... y esperamos que nos dure mucho esa sucesión, Nuria.
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